sábado, 4 de febrero de 2012

Lester Melrose y los inicios del Blues de Chicago



Los blues del profundo Delta no mutaron en el blues eléctrico de Chicago de la noche a la mañana, cuando Muddy Waters llegó en su tren desde Clarksdale, Mississippi, en 1943. Incluso antes de que Muddy hubiera puesto un pie en la ciudad, Chicago tuvo una floreciente escena de blues urbano que impulsó mucho la vinculación de los estilos urbano y rural. Gran parte de los mejores blues que salieron de la región en la década de 1930 y 1940, fueron grabados por un hombre, el productor y director de A & R, Lester Melrose.


En la década de 1990, con una industria discográfica sobrecargada con artistas, productores y tomadores de decisiones corporativas de arriba hacia abajo, es difícil imaginar que una persona como Melrose hubiera tenido tanta influencia durante ese momento álgido. Dos de los sellos más grandes en el mundo - Columbia y Victor, confiaron en Melrose para desarrollar la mayoría de los talentos de blues de sus registros. (Victor organizó a estos artistas de blues en una filial, Bluebird). Los músicos que Melrose impulsó y que se pueden considerar el quién es quién del inicio de los blues, incluyeron a Big Bill Broonzy, Tampa Red, Memphis Minnie, John Lee "Sonny Boy" Williamson, Big Joe Williams, Bukka White, Washboard Sam y Arthur "Big Boy" Crudup.

Muchos de los artistas de Melrose provenían de entornos rurales; no se podía conseguir alguien más profundo en el Delta que Bukka White, a quien Melrose grabó poco después de su liberación de una sentencia en la notoria granja Parchman. La principal contribución de Melrose en la modernización del blues fue establecer un sonido con arreglos para una banda completa. Con una agrupación tocando, con sección rítmica e incluso algunos instrumentos electrificados, se prefiguró con claridad el sonido del blues eléctrico de Chicago que comenzaría a crecer en la década de 1940.



Robert Palmer en Blues comentó: "los artistas del Melrose tenían antecedentes del profundo delta: Tampa Red, estrella del blues desde finales de los 20, llegó de Georgia; John Lee "Sonny Boy" Williamson, quien fue responsable de transformar la armónica de un instrumento de acompañamiento en una gran voz solista, fue de Jackson, TN, justo al norte de Memphis; Washboard Sam era de Arkansas; Big Bill Broonzy nació en Mississippi. Pero en aras de complacer y mantener una audiencia cada vez más urbana Melrose, quien estaba interesado en los récords de ventas y las regalías de publicación lucrativas, grabó varios tipos de material, incluidos los novedosos números de jazz y comenzó a favorecer el respaldo brindado por las bandas."

"Durante los mediados de los 30, las bandas tendían a ser pequeñas - guitarra y piano, a veces un clarinete, una tabla de lavar, un contrabajo-. Pero para el momento que Muddy llegó a Chicago, el 'Beat Bluebird,"como ha sido llamado, frecuentemente introdujo el bajo y la batería. La música era una mezcla de blues negros antiguos y de teatros de variedades con el material de los nuevos ritmos de swing. Algunos de los registros incluso destacaron a populares jazzmen afroamericanos."

Melrose fue el tipo de empresario que predominaba en los primeros días del negocio de la música. No era sólo un productor en el sentido de supervisar las sesiones, sino también un cazatalentos y editor de canciones. Sin embargo, su participación en la música fue considerable. Estableció un sonido consistente para sus producciones usando con frecuencia unos artistas para tocar en las grabaciones de otros (esto se podía ensayar en la casa de Tampa Red). Washboard Sam, por ejemplo, solía proporcionar el ritmo percusivo, incluso siendo el único acompañante (como en el material de Bukka White). En este sentido, Melrose también ayudó a crear prototipos de "bandas de la casa" que le dieron a importantes sellos de grabación, como Chess, un sonido identificable y llevaron a los oyentes a esperar una cierta calidad artística de la lista de registros de la empresa, en lugar de sólo un montón de artistas reunidos incidentalmente para tocar blues.

No sobra reconocer, por supuesto, que los músicos por sí mismos eran tan talentosos y tocaban igual para cualquier grupo que trabajara para la misma operación. Para empezar, allí estaba el mejor intérprete de la armónica del blues temprano, Sonny Boy Williamson I (no confundir con el otro gran Sonny Boy Williamson, Rice Miller, quien más tarde grabaría para Chess); la primera gran vocalista y guitarrista de blues, Memphis Minnie y Big Bill Broonzy, uno de los compositores más prolíficos de la época de la Segunda Guerra Mundial. También hizo su parte para impulsar el country blues, con algo parecido al rock and roll para la grabación de Arthur "Big Boy" Crudup, cuyo That’s All Right Mama fue cantado por Elvis Presley en 1954 en su primer sencillo.




Elvis también convertiría las portadas de Crudup My Baby Left Me y So Glad You're Mine en dos de sus más interesantes grabaciones de mediados de los años 50. En ese momento, Melrose había quedado atrás, por un sonido del blues de Chicago más crudo y fuerte y mucho más eléctrico de lo que se había desarrollado en Chess Records y en otros sellos en la década de 1940 y principios 1950. Irónicamente, Melrose había sido el primero en grabar a Muddy Waters, en una sesión de 1946, pero Muddy realmente no encontraría su voz en los estudios hasta un par de años después con Chess.

La asociación de Melrose con Columbia y Victor tuvo consecuencias de largo alcance que garantizaron la preservación de su trabajo para las generaciones futuras, de una manera que nadie podía haber previsto en las décadas de 1930 y 1940, cuando los blues se grababan estrictamente para un mercado de "raza". Estas grandes casas discográficas eran jugadoras todavía poderosas en la industria discográfica después de los 50, cuando el disco compacto comenzó a reemplazar el vinilo y cuando la audiencia de blues se había ampliado para incluir muchos entusiastas coleccionistas blancos y afroamericanos. En la década de 1990, gran parte de la obra clásica que Melrose había grabado se reeditó en CD. Como consecuencia de ello son mucho más ampliamente disponibles - y ampliamente respetados – de lo que nunca habían sido antes.